Valorar el tiempo tan «asquerosamente» preciado que tenemos. ¿Te sorprende este título? Pues no es más que el reflejo de lo que quiero mostrarte hoy con mi recomendación literaria. Este año he tenido el gustazo de leer el libro «Los asquerosos» de Santiago Lorenzo. «Un thriller estático, una versión de Robinson Crusoe ambientada en la España vacía, una redefinición del concepto «austeridad». Una historia que nos hace plantearnos si los únicos sanos son los que saben que esta sociedad está enferma«.
La historia de Manuel te atrapa desde la primera página hasta el final y las carcajadas están aseguradas. Cuidado dónde y cuándo disfrutas de la lectura porque quizá no quieras que te escuchen reír o verte sonreír. La crítica hacia la forma de vivir de nuestra sociedad es astutamente sarcástica y divertida.
«Manuel quería reunir tiempo a espuertas, con el único límite de las veinticuatro horas del día. Una cota final que le permitiría llegar a la riqueza total, la del día completo. El tiempo, gracias al cielo, tiene tope por arriba. Cosa que, incansablemente, no pasa con el dinero. Con cada céntimo que dejaba de fabricar compraba un minuto de paz a estrenar. Le parecía muy barato. Le sobraba de todo menos el tiempo. Pero no era tan soberbio como para pretender que se lo incrementasen a 25 horas al día. – Venga, que no tengo todo el día. – Es que sí que lo tienes».- extracto de «Los asquerosos».
Llevo muchos años alejada de la vorágine social, reivindicando el tiempo y su valor. Y leer historias que corroboran lo que anhelo y a los que aspiro, me dan valor, coraje y mucha fuerza. Sé que no todos estamos hechos de la misma pasta y que, en la mayoría de ocasiones, se pretende tener mucho de todo. A costa de cualquier cosa. Con este post te animo a la reflexión, a la búsqueda de tu verdadera identidad, del estilo de vida con el que te sientas feliz y a valorar el tiempo.
Valorar el tiempo mientras lo pierdes
Seguro que has escuchado la frase de que perdiendo el tiempo también se gana. A diferencia del mensaje de la sociedad de que siempre hay que estar ocupado, preocupado y generando bienes, servicios o dinero, lo verdaderamente nutritivo son los instantes. Los momentos que podemos atesorar en nuestra cuenta de vida y que, afortunadamente, son gratis.
El movimiento #LoBelloDelDía que comparto día a día y que cada vez tiene más adeptos, pasa por elegir ser feliz con lo que tienes. Por la decisión de vivir lo máximo con lo que eres. No se trata de acumular y de subir, subir, subir. Sino de vivir en paz, en armonía y con sentido común. El poder de las pequeñas cosas son las que nos nutren y nos resetean. El olor de la comida de mamá. La risa de un niño. Sus labios en mi frente. Un susurro. Una caricia. Alcanzar la cima de una montaña y divisar la inmensidad. El olor de una flor. Una tarde de lluvia. Llorar de la risa. El amanecer en la playa. La primavera. Las hojas de otoño. Unas manos bonitas. Estremecerse con su voz. La soledad elegida. El silencio. Tu canción favorita. Que te valoren. Que te valores y que sonrías.
«Es verdad que era ineludible comprar lo de comer, algún apero doméstico y un par de artículos de higiene. pero fuera de estas baraturas, Manuel no detectaba la existencia de mercaderías que quisiera adquirir. Estaba como quien no invierte en coches porque no quiere aprender a conducir. O como quien no gasta en hijos porque sabe que su vocación de padre es nula. No concebía ideas para gastar dinero. A mi entender, y a efectos pura y estrictamente económicos, la suya era una situación financiera indescascarillablemente inmejorable».- extracto de «Los asquerosos».
El minimalismo te acerca a valorar el tiempo
Quizá te he contado alguna vez que hace años vengo trabajando en lo que hoy se conoce como #minimalismo. Cuando comencé a guiarme por mi intuición, a desprenderme de las influencias tóxicas, los hábitos y dependencias enfermizas no sabía que existía un movimiento relacionado con esto. Sin embargo, yo siempre digo que mi modo de vida es personal, único e irremplazable. Puesto que me gusta mucho coger cosas prestadas de cada persona que conozco, cada situación y cada historia. Ser crítica, probar, equivocarme y adaptarlo a mi individualidad.
Dicho lo cual, para valorar el tiempo e invertir en experiencias tengo algunas cositas que contarte. Hace años que gastar poco y bien es algo que me hace feliz. No depender de objetos materiales, personas ni situaciones me hace sentir poderosa. Y esto se aplica por la ley de #ElEfectoBoomerang. Todo vuelve incrementado por mil. Y, en este caso:
- Cuando menos gastas y menos tienes, menos necesitas.
- Cuanto más disfrutas de las pequeñas cosas, más las detectas.
- Si empiezas a ver resultados, más lo sigues intentando.
- Al creer, creas.
- Si sonríes, sonríen.
Por último, espero y deseo que mi recomendación literaria de hoy te ayude a valorar el tiempo con realidad, perspectiva e ilusión. A poner el foco en lo importante y a sentirte mucho más libre. Prometo que es un chute de energía y de apertura de nuevas posibilidades por descubrir. GRACIAS por un martes más mis bellis. NAMASTÉ.
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Hola Noelia, he llegado a ti desde el instagram de Patricia a la que conozco hace ya mucho 🙂 a mi Los asquerosos me impactó, y me gustó, provocando sensaciones encontradas… te seguiré y leeré para ver si se me pega algo del minimalismo que anuncias!!
Un saludo y nos encontramos por las redes.
Muchas gracias Iván. Encantada de que te haya gustado y que también te hayas leído este libro. A mí me ha aportado un chute de minimalismo, de practicidad y de plantear la vida de otra manera. Gracias por quedarte 🙂
Muchas gracias por tu comentario Iván. Este libro produce exactamente esos sentimientos encontrados porque todos tenemos mucho de esos asquerosos… Pero es tan interesante la forma de vivir que plantea que me sobrecogió. Y no te voy a mentir pensando en mí como Manuel en ese pueblo perdido. Siento mucha predilección por vivir una temporada sin nada. GRACIAS por leerme. Un saludo