Bizcocho de algarroba, calabacín y plátano. Es una receta muy húmeda y esponjosa. Al principio pensé que no se había cocinado bien pero tiene que quedar así. Se puede comer perfectamente a bocados pero con la cuchara y crema de frutos secos también tiene su toque. La receta original pertenece a mi preciosa cordobesa Ana, la cual me inspiró para hacerlo. Te recomiendo que pases por su perfil y eches un vistazo a la sonrisa más bonita de Andalucía 😉
La algarroba es una legumbre alta en triptófano, precursor de la serotonina que ayuda a dormir bien y a ser más feliz. Esta serotonina también controla el apetito y nos ayudará a estar saciado por más tiempo. Contiene mucílagos que regulan el tránsito instestinal y son antiinflamatorios. Es energético, rico en proteína y no contiene gluten. Y lo mejor de todo, tiene un sabor muy parecido al cacao pero con menos grasa. ¿No es alucinante?
Yo compro la harina de algarroba en herbolarios y suelo utilizar la de la marca El Granero Integral o en NaturaSi Moncloa. Su textura también es muy similar al cacao en polvo por lo tanto no tiene tanta fuerza como una harina de otro cereal. Por ello, hay que tener en cuenta que puede ser nefasto usarla sola sin otro cereal. Sin embargo, en esta receta no va acompañado de nada más. Y es todo un acierto. ¿Quieres verlo?
Ingredientes para el bizcocho de algarroba
- 120 gramos de harina de algarroba
- 2 plátanos maduros
- 2 huevos enteros
- Un calabacín mediano
- 1 cucharada de aceite de coco
- 1 cucharadita de bicarbonato
- Una pizca de sal
- Anacardos troceados para decorar
Elaboración del bizcocho de algarroba:
- En primer lugar pelamos y troceamos el calabacín y los plátanos.
- Seguidamente batimos el calabacín, los plátanos, los huevos y el aceite de coco derretido. Normalmente conseguirás una textura cremosa muy manejable gracias a la humedad del calabacín. Si no fuese el caso, añade un chorrito de bebida vegetal para hacerlo más líquido.
- Tamizamos la harina de algarroba con un colador sobre un recipiente e incorporamos la sal y el bicarbonato.
- Es el momento de añadir los ingredientes secos con los húmedos e integrar bien.
- Si quieres rellenarlo con frutos rojos o frutos secos es el momento. Échalos y revuelve.
- Vierte la mezcla en un molde y decora con anacardos troceados. O con lo que te apetezca.
- Hornea durante 40 minutos a 180 grados y comprueba hasta que veas que está hecho. Ten en cuenta que es húmedo y quizá te parezca que no está hecho. Cuando tenga textura cuajada es la hora de sacar tu bizcocho de algarroba.
- Déjalo enfriar y ya tienes merienda o desayuno para varios días.
- Conserva en la nevera 🙂
Si te ha gustado esta receta y quieres más ideas para usar la harina de algarroba, pásate por el bizcocho de cacao y algarroba. Muchas gracias por estar un día más. Nos leemos muy pronto. NAMASTÉ 🙂
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